Sorprendido Physician Correctional por “tan corta” investigación de expedientes médicos de Hermes Ávila Vázquez

The content originally appeared on: Metro Puerto Rico

El presidente de Physician Correctional, Raúl Villalobos, expresó sentirse sorprendido con la rapidez que UTI Corp evaluó los expedientes médicos del confinado Hermes Ávila Vázquez, sospechoso de asesinar a Ivette Joan Meléndez Vega en Manatí, quien quedó en libertad bajo la Ley 52 de 1992.

A través de un comunicado de prensa, Villalobos indicó: “Nos sorprende que se haya evaluado un expediente que contiene casi 20 años de documentación médica, con la participación de más de una docena de médicos, y hallazgos en varias entidades, incluyendo el Fondo del Seguro del Estado, quien otorgó una incapacidad total permanente, en un período tan corto. Igualmente, nos llama la atención que no se haya procurado el beneficio de entrevistar a los médicos que tuvieron contacto directo con el paciente”.

“La ley que protege la confidencialidad de los datos médicos del paciente nos impide proporcionar información detallada sobre el historial y el examen físico que llevaron a los médicos a confirmar el diagnóstico de paraplejia. Cuando se nos permita presentar nuestra posición ante los foros competentes, demostraremos los elementos que respaldaron el diagnóstico clínico de nuestros médicos”, continuó.

El presidente de Physician Correctional reiteró “que los médicos que evaluaron el caso no autorizaron la excarcelación del recluso. Nuestra evaluación se basa en criterios científicos y datos clínicos exclusivamente”.

Sus expresiones surgen luego de que el Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR) refiriera hoy, jueves, al Departamento de Justicia (DJ) los hallazgos preliminares de la evaluación hecha a expedientes médicos del confinado.

La agencia además aseguró que entregó copia certificada del expediente completo del Programa de Comunidad de Ávila Vázquez, la lista certificada de todos los funcionarios del Programa que estuvieron a cargo de la supervisión de este confinado y su información de contacto.

“Ayer en la tarde, UTI Corp, empresa con la pericia para evaluar expedientes médicos, entregó los resultados de la auditoría preliminar de los últimos seis tomos del expediente médico de Ávila, así que de inmediato referí el caso al Departamento de Justicia para que inicie su investigación. De este modo, se garantiza la pureza de la investigación. Por otro lado, y en cumplimiento de un subpoena emitido por el Departamento de Justicia el pasado 29 de abril, se entregaron todos los documentos solicitados”, explicó Ana Escobar Pabón, secretaria del DCR.

Sobre los hallazgos de la auditoría, la titular del DCR, dijo que se pudo constatar “inconsistencias” en la documentación, discrepancias en los diagnósticos y la ausencia de evidencia que confirme los diagnósticos hechos al confinado, entre otros asuntos que al formar parte de un expediente médico son confidenciales.

“Soy consciente de la necesidad apremiante que tiene la familia de la víctima, el pueblo y el Gobierno de Puerto Rico de conocer el resultado de esta investigación. Por esta razón he agilizado la entrega de expedientes al Departamento de Justicia para que inicie su investigación. El Departamento de Corrección y Rehabilitación continuará paralelamente su investigación administrativa e irá refiriendo los hallazgos a los fiscales a cargo de esta pesquisa”, concluyó diciendo Escobar Pabón.

La Ley 25 de 1992 permite que los reclusos que están bajo condiciones de salud terminales puedan pasar sus últimos momentos de vida con sus familiares. Ávila Vázquez se encontraba cumpliendo una condena de 122 años de prisión por el asesinato de otra mujer en 2005, pero salió en la libre comunidad en 2023 bajo un pase extendido tras una alegada paraplejía.

El pasado domingo, 21 de abril, las 4:29 a.m. en la carretera PR-686, cerca de la playa Los Tubos en Manatí, fue encontrado el cuerpo de Meléndez Vega. La mujer de 56 años estaba semidesnuda, degollada y tenía heridas en la cabeza. La víctima no guardaba ningún tipo de relación con el hombre de 52 años, simplemente, habían compartido esa noche por primera vez en un negocio. Se alega que el feminicida se fue caminando después de cometer los hechos.