Recordando a las leyendas del Internet 

Tío Maceta, el mismo que hizo blackface para disfrazarse de un nazi negro en un party de Halloween de Victoria Ciudadana, hoy regresa a la última trinchera de la libertad de expresión: El Calce. Mera, woo, aquí decimos lo que nos da la gana, no como la gente del medio ese, que el jefe no los deja escribir lo que piensan ni en Twitter. ¡Jujú!

Corillo, yo sé que estas semanas han sido de pura política, y que el bori de a pie, anda cansado del mismo tema. Digo, también están los loquitos 24-7 en el fotuteo -como el piojoso de Guario por el PIP y La Crema del PNP-, pero uno puede reconocer quién no ha tenido morning sex en mucho tiempo y se les pichea.

Esta última semana antes de las elecciones es una mieLda, así que les digo a mis lectores que le den suave estos días, y no cojan lucha cibernética con esas reses -de derecha a izquierda- que siguen el repetitivo guión de cada cuatro años. Es bien importante que LEAN las propuestas de los candidatos, se metan en la plataforma Practica tu voto y el 5 de noviembre ejerzan su derecho informados. Dicho esto, hoy vamos a hablar de un poquito de historia.

Sobrinitos, vayan al pupitre que la clase acaba de comenzar. Allá para el 2009-2010, las redes sociales no eran lo que tenemos hoy día. Antes de que las strippers desempleadas pudieran promocionar sus servicios por Instagram y que se pudiera comprar hasta órganos en el market de Facebook, el Internet era un lugar salvaje, peligroso e indomable. En aquel entonces no existían los influencers, mucho menos los danzarines de TikTok ni los storytimes de inestables emocionales con sed de atención. Las redes de entonces eran un lugar vírgen y hostil, y mientras estas se iban desarrollando, tuvimos varias figuras que abrieron camino para convertirse en LEYENDAS.

Recordemos algunas de ellas:

5. La Cabeza de Christian

Christian Ortega era un estudiante de la UPR y creador de contenido que en sus vídeos hacía críticas a la administración del centro docente. Ok, para darle contexto, en 2010 hubo una huelga -algunos de los líderes estudiantiles de aquel entonces luego terminaron en la nómina del PPD, otros se volvieron plastas politiqueras como Laborde-, y este chamaco daba su punto de vista como alumno de la institución.

El bayamonés -quien tenía unos 21 años y aún estaba en primer año porque cogía nueve créditos por semestre-era el periodista ciudadano en unos tiempos donde la prensa oficial tenía dos oncitas de credibilidad. Christian fue un pionero en YouTube, y subía un contenido breve explicando algunos temas. En verdad, estuvieses de acuerdo con él o no, el tipo lo hacía muy bien. Hay que destacar que Gangster y Funky -quien siempre disfrutan el tener empleados que no cobren- le ofrecieron un segmento en El Circo, siendo el primer chamaco del Internet (si la memoria no me falla) que cruzó a un medio tradicional.

La Cabeza de Christian fue importantísimo en esos comienzos de las redes, pero el muchacho tenía la misma debilidad de Manuel Natal: ser changuísimo y derrumbarse en llanto cuando se lo vacilan. Quizás por tener poco cuero o una débil estabilidad emocional, Christian nunca pudo bregar con las críticas, y fue así como desapareció del ojo público, aunque sus fanáticos lo esperaron por años.

Según Jonathan Lebrón las fuentes de El Calce, Ortega ahora tiene una vida privada, se destaca en la industria del barismo y es corresponsal de las cosas que pasan en la UPR para el podcast “Puestos Pa’l Problema”, ya que aún sigue estudiando en vías de culminar su Bachillerato en Sociología.

2. Sorpréndeme

Evaristo -cuyo handle era Sorpréndeme, pues ese era el nombre de su blog- debe ser el primer troll profesional del Internet boricua. Desde los años en que solo habían foros de discusión -las dinosaurias plataformas de opinión antes de las redes sociales-, ya Evaristo estaba haciendo de las suyas con su personaje. Este pana hizo mil maldades, siendo la versión del Joker boricua en el Internet de esos tiempos.

Poco se conocía de él, y yo solo sé que se llamaba Hugo, o ese era el nombre que usaba en la industria p0rno (sí, este caballero unibolo también estuvo ahí “peinándole la coneja” a la actriz Alexis Texas), y fue la figura más underwater que tuvo el Internet, a pesar de su fama. Sorpréndeme era un villano diferente, no quería ser reconocido y solo tenía una misión en la vida: joder.

Cuando Twitter aumentaba en popularidad, Evaristo hizo un reportaje en su blog sobre la fila de zánganos que se amanecieron frente al primer Krispy Kreme de la isla, y ese artículo fue de los primeros en tener el nombre de “viral”.

Recuerdo que Evaristo y yo nos hicimos ciber panas, y a veces hacíamos bromas juntos. En una ocasión nos inventamos algo llamado “El party de los 3000″ en Twitter, donde supuestamente era una fiesta privada para usuarios de la red con esa cantidad de followers o más.

Los tuiteros de ese entonces se molestaron al no ser invitados a la actividad -especialmente un bobolón desempleado llamado Vladimirts-, mientras yo subía fotos montadas de la supuesta fiesta. Que buenos tiempos.

A los pocos años, Evaristo desapareció -y siendo este paciente del cáncer de testículos- honestamente creo que murió. Manito, si estás leyendo esto y no estás muerto, escríbeme… aún tenemos mucho daño que hacer juntos, como aquella vez que hicimos que dijeran en la radio que Yomo tenía una enfermedad terminal. #SeVa

3. Pistoko

Hubo una temporada oscura en Twitter en la que nacieron un montón de figuras peligrosas, y una de ellas fue el señor Pistoko. Este chico con profile pic misterioso -precursor del ski mask- se dedicaba a decir chismes de los artistas del género urbano sin medir sus palabras.

Fue Pistoko el que regó el rumor de que Mireddys (esposa de DY) mandó a desaparecer a la rubia del video “La Gasolina”; además aseguró que Gringo decía por ahí que Ivy Queen meaba pará, y hasta nos informó sobre la primera liposucción en los senos que Cosculluela se realizó en Miami, ya que temía ser apodado como “el tetón de Palmas”.

Coro, yo quiero que entiendan que Pistoko era temido, y puso a los reggaetoneros a echarse la culpa unos a otros sobre ser informantes de este personaje. Pistoko fue La Comay de las redes y tuvo el mismo impacto o más, pues nadie sabía quién era. En varias ocasiones se mencionó que Pistoko era Jadiel “El Incomparable” (RIP Goldo), Randy Nota Loka, y hasta el mismísimo Kendo, quien para aquellos tiempos subía videos a YouTube con Luian, usando el Internet de Burger King.

Obviamente, diciendo chismes del género no iba a durar mucho sin que lo descubrieran -pues los reggaetoneros y los políticos son locos choteando-, y de la nada este tipo desapareció para dejarnos con sed de información. Recuerdo que en una ocasión me confrotaron unos reggaetoneros preguntando si yo era Pistoko, así que para asegurar mi vida, les dije lo poco que sabía: “no soy yo, Pistoko seguramente es Gazoo Starr”.

4. Gazoo Starr Mi Pana Gillito

Gilberto de Jesús Casas era la bestia del Internet en esa época. Con un carisma natural, una imagen de charlatán de barrio y una cara de cabrón, fue de los pioneros que prendió la cámara para dejar salir a un pintoresco personaje que todos podríamos reconocer en nuestra familia. Gillito es ese primo que dice las peores cosas para luego darte su mejor sonrisa.

El hermano de “El Machazo” Javier de Jesús se hizo paso en las redes hablando malo, diciendo verdades difíciles de tragar y empoderando al hombre porque “lo que guardamos en el calzoncillo no es gratis”. Gilberto -quien tiene un nombre feísimo y lo sé porque soy su tocayo- fue un fokin fenómeno que llegó hasta la radio.

Lamentablemente, Gillito partió de este mundo muy temprano, y no pudimos ver su evolución. Yo espero que algún día este pana tenga un documental en el que se hable de su vida con más detalles, y que el final del mismo culmine con Gillito llegando en el triciclo del personaje “Jigsaw”, y siguiendo su camino hasta el cielo diciéndonos el reguero de malas palabras que tanto nos gustaban. Si Gillito ahora está en el cielo, yo no dudo que comparta la litera con Luis Raúl.

1. Vicente Ydrach

Bueno, es imposible culminar esta primera lista sin mencionar a Chente Enid Ycrach. No cabe duda de que “el Jar Jar Binks de Santurce” es Top 1 en esta lista, porque -le guste o no a algunos señores con sueños rotos- Enid es el fokin Michael Jordan del Internet boricua. ¿Ustedes se acuerdan cuando Fico Fronte era el personaje más duro de las redes y que hizo a una generación ponerse el #GanchoCrew? Yo creo que tengo mucho que contar aquí, pero por hoy no los voy a hacer leer más.

Pa’ la próxima, vengo con la biografía no autorizada de Chente, pues él se merece esa historia.

Esto Continuará…

Siempre Es Lunes

Coro, y recuerden que si quieres empezar la semana de la forma correcta, tienes que darle pa’ YouTube, poner en el search a Siempre es lunes, prender el cannabis, buscar el café y vacilar con el podcast más irresponsable.